jueves, octubre 19

Elementos para unas fotografías de estudio

Salir corriendo con el rimel picándome las pestañas, el polvo compacto distribuído en la cara haciéndome sentir como si llevara una máscara fina. El cabello suelto, lacio después de los minutos invertidos en repasarlo con la plancha de cerámica. El brillo de color discreto en los labios.

Llegar, pedir las fotografías, pagar, tomar el recibo, pasar al estudio, revisarme frente al espejo por última vez, pasar el cepillo por el cabello tratando de acomodarlo, acomodar delicadamente el flequillo con los dedos, sentarme en el banco, observar al fotógrafo montar un par de flashes delante de mi. Hombros atrás, rostro un poco más abajo, mira exactamente aquí (apunta). Sigo las instrucciones.

¿Lista? Sonríe. Piensa en algo agradable.

Entonces evoco tu recuerdo en mi mente. El recuerdo de ése que eras cuando empecé a quererte mientras evito a ése que eres, que me duele. Evoco tu voz diciendo: me encantan tus ojos. Evoco la sensación de tu cuerpo al lado del mío. Evoco tu aroma mudado a mi ropa a través de los abrazos. Evoco el sabor de tu boca en ese beso tuyo que no era más que la punta de un iceberg en llamas. Evoco la imagen de tu rostro cuando me dedicabas ésa mirada que hacía que todo se detuviera por unos segundos y me doy cuenta de que estoy a punto de cerrar los ojos mientras te reconstruyo en mi mente.
Flashes.

Muy bien –dice el fotógrafo- vuelva mañana a las siete.

Sonrío, agradezco, me pongo de pie, me despido.

Tengo algo nuevo de ti: la inmortalizada expresión de mi rostro, pensándote, en unas fotografías de estudio; muero de ganas de verlas.

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Extraño pero al mismo tiempo es como la noche anunciándose desde el ocaso de la tarde, es hermoso. Colores, palabras, frases, formas, tan distinto y tan tu al mismo tiempo.
Me abrazo a tu nueva presencia y me dejo los ojos para ver en esa ilusión el deseo por ver no ya tu fotografía, sino tu ser, en movimiento, en respiración, en constante transito sanguíneo.

sirako dijo...

wow!


que todas las fotos de estudio tuvieran ese sabor...

sirako dijo...

wow!


que todas las fotos de estudio tuvieran ese sabor...

- Chupycuate - dijo...

Me encanta la dulce manera que tienes de trasformar lo trivial, en una experiencia unica.

no descansamos en nada dijo...

Cuando las tengas, por favor postéalas. Yo también muero de ganas por verlas... será un descubrimiento existencial trascendentísimo para mí también.

=)