Hay días en los que vengo, con tu aroma guardado en los ropajes de la memoria y de la piel a buscarte. Días en que espero que el presente venga siempre con un futuro para ambos. Y vengo a ti, a buscar un hogar en tus brazos extranjeros, a construirnos puentes entre tu idioma y el mío; a conciliar años, credos y pasados entre nosotros. Vengo tuya, completa. Vengo para no querer irme más. Pero otras veces estás y dices o miras o callas. Y me dueles. Y no quiero que me duelas. No puedo llorar en tu cama mientras me abrazas siendo tú la causa de la tristeza. Y te quiero y temo porque tengo algunos demonios que me atormentan y también esperanzas y expectativas y voluntad. Y tengo tanto tanto que quiero darte; pero quiero que lo quieras y también quiero tus miedos y tus sueños al lado de los míos y tus noches en vela y tus errores. Y sé que no lo sabes, porque yo no lo sabía, pero me duele andar sobre esta cuerda floja. Y acaso sigo porque creo, porque espero que igual estés tú, del otro lado, avanzando de apoco, y es que amar me es tan difícil y, te amo.
(Foto: La equilibrista. Autor: Tesi Enlace: http://www.arteyfotografia.com.ar/6556/fotos/170547/)